Un Destellito en las manos de Dios
Destellito se dado cuenta que el comercio es importante para la humanidad. Y le agrada visitar los grandes centros comerciales de las ciudades, y también los pequeños. Con bastante curiosidad observa como los compradores eligen los productos que desean comprar, ya se trate de prendas de vestir, o artículos para el hogar, y también una gran variedad de objetos que piensan son útiles.
En realidad, Destellito se ha dado cuenta que los hombres y las mujeres invierten una buena cantidad de dinero en comprar, encontrando una de las razones por la que trabajan para recibir un sueldo o un salario.
Los Artículos Originales
Para Destellito resultó un verdadero
acontecimiento saber que existe el comercio ilegal. Para las autoridades
es extremadamente difícil controlar la venta fraudulenta que
generalmente se ejerce en las calles evitando el control policial. Sin
embargo, lo que más llamó la atención de Destellito es que se venden productos que son una imitación del artículo original, especialmente aquellos que son de marcas comerciales importantes, provocando un gran daño a las empresas que comercializan sus productos creados, y además engañan a los compradores ofreciéndoles un producto que no es el original presentándolo como si fuera.
Destellito suspiró profundo, y su luz comenzó a brillar muy intensamente, eso le sucede cuando se inspira para entregar una enseñanza.
Dice la Biblia, la Palabra de Dios, dijo Destellito:
Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados. Efesios 5:1. Hermanos, sed imitadores de mí, y mirad a los que así se conducen según el ejemplo que tenéis de nosotros. Filipenses 3:17.
En primer lugar, expresó Destellito, todos los creyentes deben imitar a Dios, y esa imitación debe ser como hijos amados que ven a su Padre Celestial como el perfecto ejemplo a seguir, a través de la Persona del Señor Jesús. Ésta imitación debe ser equilibrada,
ya que la Biblia enseña que también se debe imitar a aquellos líderes
que han hecho de su vida un ejemplo a seguir, y que son una bendición
para la vida de los hijos e hijas de Dios.
Los malos comerciantes, ofrecen productos que son una falsa imitación del producto original. Imitan los logos, las etiquetas, los colores, que aparentemente hacen parecer al artículo como ejemplar, y a poco andar con la prenda o cosa adquirida, el cliente se da cuenta que ha sido estafado o engañado. Más, el hijo o hija de Dios, por medio de su conducta, muestra a la sociedad que pertenece los buenos atributos del Señor Jesús y de aquellos hombres y mujeres de la fe que exhiben una vida santa e intachable, concluyó Destellito.-
Autor: Oscar Olivares Dondero
Escrito para: www.destellodesugloria.org
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