Tema: ¿Cómo salir de una prueba con éxito?
Texto: Job 42:10
Y quitó Jehová la aflicción
de Job, cuando él hubo orado por sus amigos; y aumentó al doble todas
las cosas que habían sido de Job.
Quiero comenzar el desarrollo de este sermón diciendo, que el camino de la vida
cristiana está pavimentado por dificultades y muchas pruebas, y que de
alguna manera la prueba es el elemento que Dios utiliza para llevar a
sus hijos a la imagen y semejanza de Jesucristo.
Ahora siendo que las pruebas van a ser
una parte común de nuestras vidas, debemos procurar aprender la ciencia
que hay detrás de una prueba. Así como la doctrina de la salvación, la fe, la santidad,
la oración, etc. Tienen su ciencia enseñada en la Biblia, de igual
manera la prueba tiene una ciencia y en ella se nos enseñan las
reglamentaciones que rigen una prueba.
Ahora, ¿Por qué es importante conocer la
ciencia y las reglamentaciones de una prueba? Porque nos ayudará a
prepararnos para pasar con éxito por ella. Se lo explico mejor, todos
vamos a pasar por pruebas pero no todos, tendremos éxito al pasar por
ellas, algunos fracasarán en el tiempo de la prueba, pero si logras
prepararte para ello, un importante porcentaje del éxito ya está
garantizado.
Ahora estudiemos la prueba en la vida de Job y veamos cómo él pudo pasar por ella con éxito.
Job 1:8 dice: Jehová
dijo a Satanás: ¿no has considerado a mi siervo Job, que no hay otro
como él en la tierra, varón perfecto y recto, temeroso de Dios y
apartado del mal? Estas palabras que refiere Dios sobre Job a Satanás,
lo convierten en el hombre más santo de la tierra en su época. Todo esto
antes de la prueba.
Pero veamos lo que pasó y lo que Job dijo cuando le llegó la prueba, Job 3:25 Porque el temor que me espantaba me ha venido, Y me ha acontecido lo que yo temía. 26 No he tenido paz, no me aseguré, ni estuve reposado; No obstante, me vino turbación.
A esto me refería con estar preparado para una prueba, Job dijo: no me aseguré ni estuve reposado.
Veamos algo más. Es interesante notar que el hombre que Dios describe en Job 1:8
como recto, justo, temeroso de Dios y apartado del mal, luego reconoce
que su corazón guardaba un miedo hacia Dios que no era sano, porque le
quitaba la paz, la seguridad y el reposo.
La única clase de relación que satisface
el corazón de Dios con sus hijos es aquella que es motivada por el
amor, toda otra motivación sólo desarrolla una relación imperfecta y
temporal.
En cambio el amor cubre multitud de pecados, (1P 4:8) es decir perfecciona, pero además al amor no lo apagarán las muchas aguas, ni lo ahogarán los ríos (Cnt. 8:7) el amor nunca deja de ser (1 Co. 13:8). Es decir nunca se acaba.
Job tenía una relación con Dios, pero
aun cuando Dios dio buen testimonio de Job, esta relación era
imperfecta, ¿por qué? Porque Job se acercaba a Dios motivado por el miedo. Es decir Job tenía miedo de Dios.
Dios amaba a Job y recibía las ofrendas que el ofrecía, pero las recibía con tristeza porque Job las ofrecía con miedo.
Ningún padre se alegraría al llegar a
casa y en lugar de que sus hijos saliesen a recibirle con besos y
abrazos, estos se escondiesen de él llenos de miedo. De la misma forma se siente Dios cuando nos acercamos a Él con miedo.
Una vida cristiana llena de miedo sólo denuncia la presencia de un amor imperfecto, veamos lo que dice la Biblia sobre esto: 1Jn 4:18
En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el
temor; porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no
ha sido perfeccionado en el amor.
La Biblia dice que el miedo tiene un poder magnético y atrayente, “el temor lleva en sí castigo” vs. 18 ¿cuál es el castigo que inflige el temor? Es atraer lo que se teme. Por eso Job dijo: lo que yo temía me sobrevino.
Lo que Dios está diciendo, es que cuando
le tememos a algo, realmente lo que estamos haciendo es atraerlo. Dios
no quiere que le temamos a nada ni a nadie, porque el temor lleva en sí
castigo.
Muchos cristianos viven con ese tipo de miedo
y no se han dado cuenta, le pongo un ejemplo, muchos de nosotros
venimos de hogares pobres donde por la necesidad, no fuimos bien
alimentados ni bien nutridos, y en algunos casos tal vez ni siquiera
recibimos la dosis completa de vacunas que debe recibir todo niño, sin
embargo y a pesar de eso, crecimos sanos y sin dificultades, ¿por qué?
por la protección de Dios.
Pero cuando esos niños, se convierten en
adultos y padres, reciben tanta información del mundo en materia de
salud que esa seguridad que tenían en Dios cuando eran niños desaparece y
ya no pueden ver a Dios como protector, sino que ahora siguen las
reglas de salud al pie de la letra y de tal forma, que lo que debiera
ser simple prevención de salud ahora se ha convertido en sobreprotección
médica, que en realidad no es otra cosa, que miedo a que nuestros hijos
enfermen.
Déjeme darle otro ejemplo,
cuando una persona por su condición económica crece en un barrio pobre,
su situación le hace desarrollar de manera natural cierta confianza en
la protección divina, ¿por qué? por que no le queda otra, ya que no
tiene los medios necesarios para costearse el servicio de seguridad personal.
Pero si esta misma persona llega a tener dinero,
se irá de ese barrio y buscará vivir de acuerdo a su nuevo nivel de
vida, lo cual no me parece mal, el problema se da cuando la persona
empieza a ver la nueva vida como algo que hay que cuidar de manera sobre
medida ya que ahora tiene dinero, la persona no lo sabe, pero lo que
realmente está haciendo es alejándose de la protección divina y dándole
lugar al miedo, lo cual no le dejará vivir reposado.
Volvamos a la historia de Job, ahora Dios se dispone a trabajar con esa mentira del miedo que sentía Job,
Job había alcanzado un nivel de perfección muy alto pero aún no había
desalojado de su corazón el engaño del miedo y Dios que quiere la
perfección de sus hijos no se quedaría de brazos cruzados.
Veamos ¿qué hizo?: Dios permitió que Satanás le quitara todo lo que Dios le había dado, los bienes, los hijos, la esposa e incluso la salud, a Job lo único que le quedó fue la vida y esta ya no se parecía en nada a la que tuvo.
Cuando Dios le da a alguien todo para
que viva de manera digna y cómoda, pero si esa comodidad le quita el
reposo y la paz, entonces se lo tiene que quitar todo de nuevo, para que
recupere el reposo y la paz que perdió.
¿Por qué Dios tiene que hacer esto?
Porque para Dios no es tan importante lo que te da, sino en lo que te
conviertes, Dios nos permitió a muchos crecer en medio de la necesidad y
luego le plació bendecirnos para que lo tengamos todo, pero si el
tenerlo todo te quitó lo que ganaste cuando no tenías nada, entonces te
lo tiene que quitar todo de nuevo para que recuperes lo que perdiste, el
reposo y la paz.
No hay nada más perturbador que tenerlo
todo y no tener el reposo y la paz de Dios para disfrutarlo, hay gente
que ha cambiado el reposo de Dios por el miedo a enfermar, a empobrecer y
hasta morir. Al hacer esto la protección de Dios se va.
Esto fue lo que le pasó a Job, Dios le
dio todo pero jamás lo disfrutó por que le aterraba el miedo a perderlo,
ahora veamos lo que hizo Dios para liberar del miedo al buen patriarca.
A partir del cap. 2 hasta el cap. 31
Job recibe la visita de tres amigos que le exhortaron y le reprendieron
sin éxito, ya que Job argumentaba mejor delante de ellos. Pero a partir
del cap. 32 entra en escena un joven llamado Eliú y al parecer este logra hacer reflexionar a Job, y sólo después que el joven Eliú le habló, Job guardó silencio y no volvió a argumentar en su favor.
Inmediatamente después que el joven Eliú habló a Job,
este experimentó una teofanía, es decir Dios se le reveló y le habló.
Llama mucho la atención el éxito que tuvo Eliú sobre Job que amerita
nuestra investigación, veamos quién era:
Dice el cap. 32:2 que
era hijo de Baraquel buzita, es decir que era de la ciudad de buz, de la
familia de Ram. Baraquel significa: a quien Dios ha bendecido, pero
Eliú significa: “El mismo es mi Dios”.
Ese nombre dice mucho, porque es muy
posible que el mismo Cristo se personificara en Eliú ya que además
dice: que era de la familia de Ram, que significa: Alto, elevado y
sublime, estos no son atributos humanos sino divinos.
¿Qué nos quiere decir todo esto?, que
cuando pases por una prueba y te sientas desfallecer en medio de ella,
El se te manifestará y te enseñará lo que nadie te puede enseñar, porque
El mismo ya pasó por algo parecido cuando estuvo en este mundo.
Por eso dice la Biblia que Eliú, era de
la región de Buz, que significa: despreciado, saqueado y desolado, sólo
alguien que pasó por lo que tú estás pasando te podrá entender, nadie
habla mejor el idioma de los dolientes, que aquel que sufrió el dolor,
por eso Jesús puede socorrer a los que sufren, porque El mismo ya pasó
por eso.
Hebreos 2:18 dice: “Pues en cuanto él mismo padeció siendo tentado, es poderoso para socorrer a los que son tentados”.
Ahora veamos como Job terminó la prueba:
Y quitó Jehová la aflicción de Job, cuando él hubo orado por sus
amigos; y aumentó al doble todas las cosas que habían sido de Job. 42:10
Note que la Biblia dice que oró Job por
sus tres amigos, no por Eliú, porque a diferencia de Eliú los tres
amigos: Elifaz, Bildad y Zofar no hablaron rectamente de Dios ante Job.
¿Por qué Dios advierte en el cap. 42:8
a los tres amigos de Job de tratarlos con afrenta si es que Job no ora
por ellos?, ¿Dónde está la gravedad de lo que hicieron?. Estudiemos
esto:
“Elifaz” era temanita
es decir descendiente de Temán, este Temán era a su vez descendiente de
Esaú, el que menospreció su primogenitura y la vendió, Esaú y su
descendencia representan la infidelidad, es decir aquellos que siendo
hijos no saben honrar su identidad.
“Bildad” significa:
hijo de contención, Este en cambio representa el espíritu contencioso,
son los sabios en su propia opinión, son los que mejor conocen la
Palabra pero no han tenido una experiencia de nacimiento espiritual con
el Dios de la Palabra.
Estos son los que contienden por todo,
cuestionan toda autoridad, y no hay pastor ni predicador que sepa más
que ellos, y si se trata de juzgar algún asunto son implacables con las
ovejas y no tendrán piedad del rebaño.
Y por último está “Zofar” que
quiere decir: “chirriante” o “que rechina” Estos son los que cuando
hablan lastiman los oídos de los que los escuchan, hablan sin respeto de
quien sea, algunos de ellos son predicadores, y cuando predican pasan
por encima de cualquiera.
Job tuvo que soportar por largas horas a
estos tres grandes representantes de la religiosidad y carnalidad
humana, la maldad de Job era un juego de niños al lado de la de estos
tres juntos.
Dios le dijo a ellos, si mi siervo Job
no ora por ustedes traeré afrenta sobre los tres. Orar por ellos le
significaba a Job perdonar y olvidar la infidelidad de Elifaz, las
contiendas con Bildad y las palabrerías de Zofar.
Pero eso hacía diferente a Job de los demás, su nombre significa: “perseguido y el que llora y se lamenta”, él
estaba enseñado a lidiar con la persecución, no le sorprendían las
infidelidades, ni las ínfulas de superioridad de sus amigos y tampoco
las desentonadas oraciones de quienes fungían de espirituales.
El vivía el evangelio verdadero de su
época, amaba si lo aborrecían, sufría si alguien caía en pecado, lloraba
largamente por los pecadores, Job conocía no sólo la Biblia sino además
al Dios de la Biblia.
El corazón de Job estaba muy por encima
del religioso común de su época, su única deficiencia era conocer a Dios
a través del miedo, pero ahora la vida le cambiaría, porque Job pasó la
prueba y sus miedos fueron desalojados de su corazón.
Ahora Job estaba listo para un nuevo
nivel de bendición. “de oídas te había oído más ahora mis ojos te ven”
denuncian que dentro de él todo cambió, su perspectiva de una prueba y
su forma de acercarse a Dios nunca más serían igual, ahora Job ya no
conocía el miedo, porque la prueba lo perfeccionó en el amor, y el
perfecto amor echa fuera el temor.
Luego Dios aumentó al doble todas las
cosas que habían sido de Job, cada vez que sales con éxito de una
prueba, inmediatamente entrarás por la puerta de una bendición mayor.
Toda prueba tiene una puerta de entrada
pero también una de salida, cuando la prueba te ha procesado
correctamente entonces encontrarás la puerta de salida y cuando la
encuentras y sales descubres una puerta de bendición mayor.
Toda prueba tiene como propósito
procesarte y perfeccionarte, si logras salir con éxito de ella, entonces
vendrán sobre ti bendiciones que sólo pertenecen al nuevo nivel
espiritual que has adquirido. Pero si no lo logras tendrás que repetir
la prueba una y otra vez hasta lograrlo.
Veamos algo más: a Job
ahora no le puede ir mejor, si antes fue el más rico de todos los
orientales, ahora es doblemente más rico que todos ellos, pero no sólo
eso sino que además le fueron concedidos años de vida para disfrutar
esas riquezas hasta con sus tataranietos. Pero lo que es mejor es que
nunca más volvió a sentir el miedo que antes lo perturbaba.
Esto es un principio espiritual si una
prueba ha sido pasada con éxito jamás se puede repetir, ¿Por qué? Porque
la razón de la prueba es arrancar del corazón el elemento que la
provocó.
Fue el miedo de Job lo que atrajo el
mal, pero la prueba le arrancó el miedo del corazón y por ende el diablo
no podía volverlo a tocar jamás. Por eso 1Jn. 5:18 dice: Sabemos que el
que ha nacido de Dios no peca; pero el Hijo de Dios lo guarda, y el
maligno no lo toca.
Job ahora vivía la plenitud de la vida
espiritual, llena de la presencia de Dios, llena del gozo de la
salvación y llena de belleza espiritual. Veamos ¿Dónde dice esto?.
Job tuvo diez hijos después de la
prueba: tres hermosas hijas y siete hijos, la Biblia dice que las hijas
de Job eran las más bellas de toda la tierra, la primera se llamó Jemima, la segunda Cesia y la tercera Keren-Apuc. Job plasmó en los nombres de sus hijas lo que ahora sentía en esta nueva etapa de su vida: su primera hija se llamó jemima que significa paloma, que es figura del Espíritu Santo, Job vivía una nueva unción y presencia de Dios. A la segunda le puso Cesia que significa canela que quiere decir dulzura, ahora Job ya no sentía amargura, ni tristeza si no dulzura y gozo,
Y a la tercera le puso Keren-Apuc
que significa belleza, esto tiene relación con el producto terminado,
es decir, la prueba de Job sólo tenía un fin, hacer de Job un hombre
cuya vida ahora ya no sólo reflejaba belleza sino que incluso la
contenía.
Este nuevo nivel de vida espiritual no
se logra fácilmente, sino que es el resultado de haber pasado con éxito
los procesos de una prueba, por eso la biblia nos compara con el oro y
con la perla, por que estos elementos no se forman con facilidad, pero
cuando se forman su belleza no tiene igual.
Veamos el caso del oro, se cree que durante la formación de la tierra, muchos metales como el hierro y otros metales como el oro y platino fueron arrastrados hacia el núcleo del planeta.
Se calcula que en el centro de la
Tierra, es decir a las más altas temperaturas, allí existe suficiente
oro como para cubrir toda la superficie del planeta con una capa de
grosor de unos 4 metros de altura. Es decir el oro se forma bajo gran
presión. La idea es, a mayor presión mayor belleza.
Por eso la biblia dice que en el cielo
las calles son de oro, porque esto representa, lo difícil del camino en
la vida cristiana, pero el camino espiritual no puede ser fácil, porque
si lo fuera entonces las calles del cielo no podrían ser de oro.
Por otro lado tenemos la perla,
la biblia dice en Apocalipsis 21:21 Las doce puertas de la Nueva
Jerusalén eran doce perlas; cada una de las puertas era una perla. ¿por
qué? por que la perla al igual que el oro se forma en circunstancias
difíciles.
En la Nueva Jerusalén la puerta de perla
es similar en significado a un arco del triunfo. Hace mucho tiempo, las
personas daban una gran bienvenida a los soldados que regresaban
triunfantes de la guerra.
Ellos construían un ‘arco del triunfo’
en los parques o en las calles y los nombraban para conmemorar la
victoria. Especialmente, el comandante general pasaba a través del arco
del triunfo en un carruaje enviado por el mismo rey. Cuando llegaban al
lugar de la celebración cantando canciones de victoria, el rey, la reina
y todos los ministros les daban la bienvenida.
Cuando el general bajaba del carruaje y
se inclinaba delante del rey, éste lo hacía levantarse, celebrar su
victoria y compartir juntos el gozo en una fiesta.
La perla está hecha de una forma muy
diferente a las otras joyas. Todo el oro, la plata y las piedras
preciosas, todo proviene de la tierra. Pero la perla, es hecha de forma
única por algo que tiene vida. Permítanme explicarles brevemente cómo se
forma una perla. La mayoría de las perlas son producidas por las
ostras. Estímulos típicos incluyendo material orgánico, parásitos o
incluso un daño físico provoca el desplazamiento de la capa del tejido a
otra parte del cuerpo de la ostra.
Pequeñas partículas u organismos entran a
la ostra cuando las válvulas de la concha están abiertas para respirar o
alimentarse. en ocasiones algunas substancias microscópicas extrañas y
duras como un grano de arena entran a la ostra.
Luego, se dice que la ostra siente un
dolor fuerte, como si una aguja está perforando su carne. La carne de la
ostra es muy suave, pero la sustancia extraña es muy dura y afilada y
realmente atraviesa la carne.
Ahora el secreto del nácar de la ostra,
el cual es la madre perla, cubre lo que está irritando. Este proceso de
secreción se repite muchas veces, produciendo así una perla. En la
actualidad la mayoría de las perlas son cultivadas a través de aplicar
el principio de la producción de la perla. Introducen un estímulo dentro
de la concha, el cual es un intruso para la ostra. Cuando la ostra
cubre esta sustancia, la cobertura es el nácar. Entre más grueso sea
este nácar, más intenso será el brillo de la perla.
Cuando vemos la superficie de la perla,
aquellas que son de alta calidad reflejarán nuestros rostros con
claridad como en un espejo. Si la capa de nácar se vuelve más gruesa, la
perla también se volverá más grande y obviamente más costosa.
Si nosotros queremos ir a la Nueva
Jerusalén, Tenemos que hacer una perla de nuestro corazón. ¿Qué
significa esto? La ostra que produce la perla soporta con dolor y
secreta el nácar para hacer la perla. De la misma forma, los hijos de
Dios también tienen que sufrir el dolor de las pruebas, hasta que
recuperen totalmente la imagen de Dios y se pueda reflejar en ellos, su
maravillosa belleza.
Autor: Alfredo CampoverdeEscrito para www.destellodesugloria.org
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